CASLA - NOTÍCIAS


Alfredo Bryce Echenique presenta El Huerto de mi Amada:

(22/03/03)



Bryce Echenique: "A los maestros del boom latinoamericano les faltaba humor"
El escritor peruano promociona la novela por la que ganó el codiciado Premio Planeta. Ahora prepara un libro sobre la historia de su familia en Perú.


Alfredo Bryce Echenique no es el único preocupado de sus ancestros. Mario Vargas Llosa, en su novela sobre Flora Tristan y Paul Gauguin, también hablará de los tatarabuelos de Bryce. "Flora y Gauguin fueron muy cercanos a mi familia. Pero yo no podría haber escrito esa novela, porque ellos no serían la prioridad; la prioridad sería mi familia. Además, creo que Mario va a hacer algo insuperable, lo va a meter todo, porque ha investigado como loco y él me ha aportado datos de mi familia que yo desconocía".

Bryce siente gran aprecio por el autor de Conversación en la Catedral y piensa que ya es hora de que la Academia Sueca lo reconozca. "El Nobel no puede seguir equivocándose como se equivocó con Borges. Que no se equivoque de nuevo con Mario. El ya lo ganó hace tiempo".

Bryce es más modesto para evaluar su trabajo. Admite ser un escritor "que ha permitido que la gente más joven tenga una entrada mucho menos reverente a la literatura, que la tome como algo más familiar, pero no he querido ser nunca una persona que de consejos , porque soy muy dubitativo, y no me gustan los cánones".

Aunque su nombre ha sonado para el Premio Cervantes, lo que reconoce como un honor, duda que se lo den "porque soy un humorista".





El Premio Planeta de Novela le reportó a Alfredo Bryce Echenique (Lima, 1939) un número nada despreciable de lectores -lleva meses entre los más vendidos- y una cantidad de dinero muchísimo menos despreciable (unos 430 millones de pesos). Pero él mira con distancia e ironía el cuento del éxito. "Creo en la frase que decia Hemingway, que el más grave peligro de un escritor es el éxito, la gloria, el dinero y las mujeres y el alcohol, pero también ¡la falta de gloria, dinero, mujeres y alcohol! Hay que buscar una posición ecléctica, el equilibrio de un malabarista de circo".

Bryce Echenique vino a Chile como parte de una gira de promoción de su novela El Huerto de mi Amada, ganadora del Planeta y en la que relata la historia de amor entre Carlitos Alegre, un chico bien de 17 años, y Natalia Larrea, una mujer de mundo de 33 años, en el Perú de mediados del siglo XX.

Autor de novelas entrañables como Tantas veces Pedro o La Vida Exagerada de Martín Romaña, Bryce Echenique ha ganado nuevos lectores con el premio, pero también ha despertado suspicacias. "Hubo alguien que en un artículo malintencionado se preguntó, como sugiriéndolo, si Bryce va a perder sus lectores por culpa del Planeta, se va a quedar con los lectores del Planeta y va a perder los suyos, porque Bryce era un autor más de culto y sus lectores fieles se iban a sorprender al ver la imagen de esta especie de ídolo despistado convertido en ídolo de masas y de pie. Pero eso no ha sucedido", dice.

Del mismo modo, desecha los comentarios que señalaban que su galardón estaba reservado de antemano. "Esas son bolas que corren. Yo me presenté por mi lado en forma independiente con la novela terminada. Y lo hice porque la había terminado a tiempo para postular y ¿por qué no?".

Bryce confiesa que el premio "me ha dado posibilidades para escribir, más tiempo libre, y la posiblidad de realizar mi vida como la quería, viviendo entre Europa y Perú".

Después de 30 años fuera de su país, con estancias en España y Francia, el escritor a regresó a Lima en 1999. Ahora compró un departamento en Barcelona -"que están terminando de arreglar, se supone"- y ha empezado a pensar en sus próximos proyectos. Entre viajes y hoteles, escribe páginas del segundo tomo de sus memorias, sin saber aún cuando lo concluirá, y traza líneas de un nuevo libro de ficción.

"Estoy leyendo muchísimos libros de historia del Perú, de las familias grandes del Siglo XVII, para ambientar mi nueva novela, que va a transcurrir en el Perú en esa época hasta llegar al día de hoy. Quiero novelar la historia de mi familia en ese período", adelanta. Su plan es dar cuenta de los cambios de su país a partir del microcosmos familiar.

Los viejos amigos

Bryce Echenique alcanzó fama con su primera novela, Un Mundo para Julius, en 1970, cuando el fenómeno del boom latinaomericano había despegado. Aunque el movimiento ya no existe, sus ex miembros siguen activos. García Márquez publicó el año pasado el primer tomo de sus memorias, Carlos Fuentes acaba de publicar una nueva novela en México y Mario Vargas Llosa lanza la próxima semana su novela El Paraíso en la otra Esquina.

"Yo tuve una relación doble con ellos. Como profesor universitario, tuve que leerlos y releerlos para mis clases en Francia. Y como muchos vivían en París y Barcelona, fue también una relación de amistad, y conocí los entretelones de las lindas cosas que tuvo el movimiento y también las tensiones, cómo se separaron. Casi soy el único que sigue siendo amigo de todos, porque entre ellos, al final, si no hubo enfrentamiento, por lo menos hubo silenciamiento, y cada uno se fue por su lado".

Aunque fue amigo de ellos, Bryce tomó distancia al momento de escribir, influido por Cortázar y Manuel Puig, de los que aprendió el amor por los sentimientos y la risa. "A los maestros del boom les faltaba humor. Yo los leía y releía y los encontraba tan serios, si en América Latina se ríe uno tanto, y después ellos mismos se van a comer todos juntos y se matan de la risa, pero en los libros se ponen tan serios. No nos acartonemos tanto, pensé yo".

Para él, de hecho, no existe oposición entre el humor y la profundidad. "Eso es un disparate tan grande como cuando dijeron que Chaplin se había presentado a un concurso de imitadores de Chaplin y llegó tercero. Ahí la falla estaba en el jurado... Creo que el humor no es lo contrario de lo serio, sino de lo aburrido. El humor permite contar mil cosas que la seriedad no puede hacer. El humor inteligente, de la ironía, la tolerancia, es la democracia por excelencia", asegura.





há mais de 20 anos na Luta pela Integração Latino-Americana